La
publicidad es cantada, lo cual indica que no es una propaganda seria
¿Era necesario ser tan
cruel con los pobres creativos que pergeñaron una publicidad que,
evidentemente, no fue del agrado de quien suscribió esta frase? Si yo canto
-cante lo que cante, y cante cómo cante-, ¿dejaré de ser respetado? ¿Debería
dejar a un lado mi guitarra y proceder a leer solemnemente la letra de cada
canción? ¿Se ganan amigos y fans de este modo? Al menos ya sabemos lo que hay
que hacer para descontracturar un poco una situación que se ha vuelto tensa o
fría. Algo es algo.