Bienvenido
a esta prueba épica…
No podemos negar que,
luego de semejante introducción, nuestras expectativas frente a un examen a
punto de ser corregido son realmente altas. Al mismo tiempo, la tensión aumenta
tras cada renglón, temiendo que tal promesa sólo quede en palabras vacías, y que
todo no sea otra cosa que un engaño. Porque puede fallar, como decía Tusam.
Puede fallar.