lunes, 22 de enero de 2024

Láser

       


El láser apuntaba y grababa la música

El láser va a rallar un disco

El láser siente cambios y vibra haciendo sonidos según esos cambios

 

Hay términos propios de la tecnología que a veces se ponen de moda, y a los que los escritores siempre han acudido al momento de tener que desarrollar tramas sobre temas que muy bien no conocen. Así, el espacio que hoy ocupa la AI (inteligencia artificial, por sus siglas –y orden- en inglés), ayer lo reclamaba todo lo relacionado con la física cuántica, y anteayer el siempre mágico rayo láser. Y no, hoy no hablaremos de los sables que sostienen algunos de los personajes de Star Wars, sino de la relación que este llamativo invento tiene con la industria de la grabación sonora. Porque desde la aparición del compact disc, allá por 1979, de repente descubrimos que el láser nos regalaba un nivel de audio increíble, y la posibilidad de contener en un pequeño disco nuestra música para siempre. Sí, por toda la eternidad. Sin gastarse, sin el riesgo a perder calidad que siempre asustó a los dueños de vinilos y cassettes, quienes veíamos degradarse nuestro universo sonoro con cada reproducción, canción a canción. Por eso, no deja de ser hermoso el descubrir que sus virtudes también son apreciadas por nuestros alumnos, con el agregado de nuevas sugerencias o características que, hasta el día de hoy, ignorábamos. Porque el láser tiene aguante, claro que sí.